En algún lugar bajo la lluvia siempre habrá un perro abandonado que me impedirá ser feliz. Jean Anouilh
SI ESTÁS BUSCANDO UNA MASCOTA PARA ADOPTAR, PINCHA EN MI ELINK DE FACEBOOK DONDE ENCONTRARÁS MUCHOS DE DIFERENTES PROTECTORAS Y GRUPOS. NO LO DEJES PARA MAÑANA, PUEDE QUE SEA YA DEMASIADO TARDE.
Powered By Blogger

Seguidores

Ya son más de 2.300 seguidores, súmate

sábado, 27 de febrero de 2010

En memoria de Mini, la elefanta del Zoológico de La Habana.

¿Te gustaría vivir así?



 Pués así fue la vida de Mini, la elefanta del Zoológico de La Habana.

                                         Foto de Mini, cortesía de Jorge Luis Pérez Megret.


Corrían los años 70, yo era un niño, y como todos los infantes, ir al parque zoológico era para mi algo muy emocionante, la única oportunidad de un niño de ciudad de estar en contacto al menos visual con animales de diferentes partes del mundo.

Recuerdo perfectamente a Mini, una elefanta preciosa, con una gruesa cadena de poco más de metro y medio atada a una de sus patas y el extremo fijado al suelo, no puedo precisar si con hormigón o una estaca de hierro clavada en la tierra, pero bien amarrada estaba porque que yo sepa nunca consiguió soltarse por más tirones que diera a su atadura.

¡Que inocente era entonces! Estaba convencido de que aquellos movimientos repetitivos del animal, aquellos balanceos hacia alante y hacia atrás, aquel bailecito gracioso con giros de cabeza incluídos, eran muestra de lo feliz que estaba y que por eso "bailaba" para el deleite de los que la visitábamos.

Hoy, me doy cuenta que su danza suplicante era consecuencia del sufrimiento al que estaba sometida, símbolos inequívocos de ansiedad y estrés, como mismo le sucede a Susi la elefanta del Zoológico de Barcelona de la cual también publico un artículo en este blog.
Imagen obtenida gracias a la inestimable colaboración
de Richard Viamontes Leal
.

Mis visitas al parque eran por lo menos una o dos veces al mes, a mi madre le encantaba y ella sabía cuanto yo lo disfrutaba.
Un día llegamos y Mini ya no estaba, misteriosamente había desaparecido y por mucho que preguntamos nadie nos dió explicación alguna, no estaba y punto, así suceden las cosas en Cuba.

Esta mañana, buscando en la red, encontré una entrevista que un diario cubano hace al actual director del parque, donde le expresan las quejas de la población por la poca variedad y cantidad de animales y entre otras cosas dice "Tuvimos a Mini durante mucho tiempo, pero se le habían dañado las patas y padecía de artritis, por estar en un local tan pequeño y llevar una cadena". Pobre Mini.

Quién quiera leer la entrevista e informarse un poco más de cuál es la situación de este parque habanero LA TIENE AQUI aunque está maquillada por los intereses del gobierno ya que si este señor dice la realidad por la que están pasando posiblemente le pase lo mismo que a Mini, la elefanta encadenada.

¡Este modesto homenaje va por ti MINI!


Gracias a la insistencia de mi amigo Richard Viamontes Leal, el zoológico ha contestado, resulta que el nombre era Mimi y no Mini como yo pensaba y que según ellos murió en 1991. 

La memoria nos falla muchas veces, pero hay un desfase de 20 años entre la fecha que yo creía y la que ellos dan, aquí os dejo la entrada que publicó el zoológico y que cada uno saque sus propias conclusiones. 

La vida y muerte de la elefanta fue mucho más trágica de lo que habría podido imaginar. 

Mimi vive en el recuerdo de muchos de los que pudimos verla, su vida fue una tragedia que espero les sirva de experiencia para que no vuelvan a repetir los errores cometidos con ella, EPD para siempre.   

2 comentarios:

  1. Murio joven yo la conosi linda elefantita mis padres me llevaban de niña siempre estaba encadenada nunca te olvidaremos mini

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo también la recuerdo, pobrecita, que vida tan miserable tuvo. Gracias por tu comentario. Saludos.

      Eliminar